La actualización del Plan Esencial de Aseguramiento en Salud (PEAS) del Ministerio de Salud utiliza una calificación patologizante de las orientaciones sexuales e identidades de género dentro colocándolas dentro de una lista de enfermedades mentales, lo que va en contra de las normativas de la Organización Mundial de la Salud. Se trata de una amenaza que abre las puertas a las mal llamadas “terapias de conversión”.
Profesionales de la salud mental y defensores de los derechos humanos se manifestaron en rechazo a la actualización del Plan Esencial de Aseguramiento en Salud (PEAS) del Ministerio de Salud (MINSA), un documento que se basa en una Calificación internacional de enfermedades publicada en 1992 que incluye categorías desactualizadas y estigmatizantes para la población LGBTIQ+, y que representa una grave amenaza, especialmente para la población trans.
Esta tarde, la Asociación Civil Más Igualdad Perú presentó una carta dirigida al titular del sector, César Vasquez, en la que 414 profesionales de la salud mental, con el respaldo de 176 representantes de organizaciones LGBTIQ+, de Instituciones de Salud Mental y de Derechos Humanos. Humanos, exigen revertir la decisión de incluir la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades (CIE-10), y piden en su lugar adoptar la versión actualizada el año 2018 por la Organización Mundial de la Salud (CIE-11), en la que se eliminan diversas categorías patologizantes para las personas de la diversidad sexual y de género, entre ellas transexualdiad y travestismo.
“Resulta peligroso y preocupante utilizar un documento que hace referencia a categorías desactualizadas de diagnóstico que tanto la propia Organización Mundial de la Salud y otros organismos de salud mental internacionales han catalogado como patologizantes, y que no responden a la realidad científica y social de las personas de la diversidad sexual y de género”, señala la carta enviada a la institución.
En la misma misiva, también se cuestiona el último comunicado emitido por el MINSA, al no encontrar en él ninguna propuesta de acción hasta el momento que permita evitar las graves consecuencias que alertan las personas firmantes.
Además, el pronunciamiento denuncia que actualmente en las directrices o protocolos del Ministerio de Salud se aplican de manera indistinta el CIE-10 o el CIE 11. “Esto deja en evidencia que no se ha realizado una actualización de las categorías de diagnóstico y el uso de manuales clínicos ajustados a los estándares internacionales, poniendo en riesgo, no solo a la población de la diversidad sexual y de género, sino a todas las personas que requieran atención médica o de su salud mental”.
UNA PUERTA A LA TORTURA
Para la Asociación Civil Más Igualdad Perú y los firmantes, insistir en la aplicación de esta política desactualizada en el Ministerio de Salud pone en riesgo a las personas diversas exponiéndolas a cualquier esfuerzo por cambiar su orientación sexual, identidad o expresión de género, prácticas que ya se realizan en el Perú y que son mal llamadas “terapias de conversión”.
Se tratan de acciones que constituyen formas de tortura, tratos crueles, inhumanos o degradantes y que son considerados de esa manera desde el 2012 por la Organización Panamericana de la Salud y catalogadas como tortura por la Comisión interamericana de Derechos humanos.
PARA TENER EN CUENTA
El Estudio de Salud Mental publicado por la Asociación Civil Más Igualdad Perú encontró que cerca del 40% de las personas LGBTI que participaron habían sido sometidas a “terapias de conversión”, la mayoría de ellas cuando tenían menos de 18 años.
Varias de estas prácticas se basaron en técnicas aversivas o incluso procedimientos médicos invasivos, las cuales han sido reconocidas como inapropiadas, inhumanas y antiéticas por renombradas instituciones científicas.
Con el retiro de la homosexualidad del Manual Diagnóstico y Estadístico de Desórdenes Mentales (DSM) por la Asociación Americana de Psiquiatría, en 1973, y de la OMS en 1990, muchos otros organismos internacionales de salud comenzaron a pronunciarse en contra de la patologización de la diversidad sexual y de los diferentes esfuerzos por cambiarla.
SABÍAS QUE
Esta reciente amenaza a las personas LGBTIQ+ ocurre a puertas de conmemorar el “Día internacional contra la homofobia, Bifobia y Transfobia” y el “Día Nacional de Lucha contra la Violencia y Crímenes de Odio”.
A diferencia de otros países, el Perú no tiene una ley que prohíba las mal llamadas “prácticas de conversión” a diferencia de otros países de la región.
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